miércoles, 3 de noviembre de 2010

El síndrome del ejecutivo spining

Conoces las bicicletas de spining, son un tipo de bicicleta estática que encuentras en gimnasios de alta gama, aquellos a donde acuden los ejecutivos a entrenar su estado físico para soportar el afán de cada día, los ves llegar, ponerse su ropa deportiva de marca, calzar sus zapatos también de marca, ajustar su cronómetro y empezar a pedalear, unos minutos después ya sudorosos, observan el contador de “kilómetros recorridos” que utopía, recorrer kilómetros sin moverse un centímetro del sitio inicial, y observan que no han avanzado suficiente, así que aceleran el ritmo, pedalean más y más rápido, casi con furia, si les preguntas a donde van, contestan a ninguna parte y aceleran más el pedaleo, si vuelve a preguntar a donde van, contestan, no se, si insistes quizá logres un que te importa, cuando en realidad a ellos tampoco les importa, no se trata de avanzar, ni de llegar, solo de pedalear.

 Este síndrome lo observarás en sus vidas diarias de empresa, conservan la costumbre de pedalear, solo pedalear, para mantenerse activos, sin importar si la actividad se transforma o no en efectividad.



Trabajé varios años como ejecutivo en una empresa constructora y allí veía llegar todos los días a muchos de los mejores ciclistas que he conocido, los obreros. Ellos no ganan carreras, no compiten por premios, no conocen de aerodinámica, no planean nada, pero conocen todo, lo aprenden desde pequeños, se adaptan a sus posibilidades y aceptan que es un buen medio para transportarse, saben cuando tiempo emplean en llegar de su casa a la obra, saben perfectamente que ruta deben usar, llevan consigo las herramientas y refacciones necesarias en caso de una varada, pedalean con un objetivo, deben llegar a un lugar, a una hora específica y adicionalmente mantienen un buen estado físico, logran algunos ahorros y no tienen que depender del transporte, no les afectan los trancones.



Para ellos una bicicleta estática (la versión estrato bajo de la de spinining) es poca menos que una burla, un juguete para niños, no le encuentran ninguna gracia y no les parece interesante concentrarse en pedalear sin avanzar.



El ejecutivo spining



Debería fijarse un objetivo específico



Dejar de considerar la actividad como un equivalente a efectividad.



Dejar de considerarse importante solo si se mantiene ocupado.



Aprender a delegar, como una forma de incrementar su eficiencia.



Aprender a nivelar las diferentes áreas de su vida personal y laboral



No pretender que todos lleguen a ser como El, en lugar de ser tan eficientes como El.



Preguntarse periódicamente para que sirve la actividad que realiza y si existe alguna forma de reemplazarla eficientemente.



No olvidar que no hay nada mas ineficiente que hacer eficiente lo innecesario.



Escuchar a su equipo, especialmente cuando presentan soluciones novedosas.



Permitir a otros, opiniones sobre la forma de hacer las cosas, podrían tener razón



No creer que son irreemplazables. los cementerios están llenos de personas en cuyo epitafio podría escribirse “era irreemplazable"



No creerse el cuento de que es quien más sabe del negocio, si eso fuera cierto como explican que otros constantemente los superen?







Los ciclistas profesionales recorren grandes distancias, se fijan una meta a donde llegar, planean una estrategia, averiguan por la ruta, en donde hay que subir, en donde hay que bajar, en donde necesitan ayuda, en donde pueden brindarla, usan la cantidad adecuada de esfuerzo en cada tramo de la etapa, toman el descanso necesario para recuperar su nivel optimo de energía, se ayudan con buen alimento, se hidratan, reciben masajes, consejos de expertos, ayudas de la tecnología, un uniforme adecuado, guantes, casco y llantas adecuadas, aprenden cual es la mejor ubicación que deben adoptar en la bicicleta para usar mejor su energía, planean casi todo, dejan muy poco al azar, se apoyan en su equipo, por eso casi siempre completan con éxito sus hazañas.



El ejecutivo spining rara vez sabe a donde va, no conoce el negocio, ignora a su equipo, emplea inadecuadamente la tecnología, suele usar el uniforme equivocado y siempre está ocupado, tan ocupado que su familia y amigos suelen reemplazarlo, trabaja incansablemente largas jornadas y en su tiempo libre se ocupa de hacer lo que sea necesario para no estar desocupado.

La autoestima

La Autoestima




Es obvio que se llama auto estima porque corresponde a la estima que cada uno tiene de si mismo, por lo tanto es una idea personal, que nace desde adentro de cada uno y no tiene nada que ver con lo que los demás piensen u opinen de ti.



Por tanto la baja autoestima es una baja auto evaluación, lo que tu crees que eres, lo que piensas que vales y lo que te parece que representas para ti mismo y para los demás.



La autoestima entonces reside completamente dentro de ti y siendo tu propia evaluación no debería ser baja, entonces por qué muchas personas hablan de tener baja autoestima?



En primer lugar: Porque no han aprendido a confiar en si mismas y viven por tanto “escuchando” lo que hay alrededor de ellas. Aprenden a leer entre líneas los mensajes que reciben de los demás, los interpretan y filtran con sus propias creencias, adaptándolo a lo que quieren creer, escuchar o leer en los demás.



En segundo lugar porque necesitan y esperan la aprobación de los demás, ellos deben validar todo lo que hacen., esta aprobación ( o desaprobación) muchas veces no llega, lo cual genera incertidumbre, ansiedad e inseguridad.



En tercer lugar porque no se escuchan a si mismos, no creen ni confían en su intuición. Al no tener confianza en lo que piensan o dicen, optan por concluir la poca validez de si mismos y de sus ideas.



En cuarto lugar porque se juzgan con demasiada severidad, cada vez más severos ya que se sienten reincidentes, por tanto dignos se ser más firmemente castigados. La cultura de algunos de nuestros países concluye que lo bueno es lo que se espera, por tanto no tiene gracia reconocerlo, pero lo malo hay que ponerlo de presente. Esta costumbre genera mensajes equivocados, ya que una persona poco recibe retroalimentación positiva y si mucho negativa.



En quinto lugar porque viven evaluando el pasado, especialmente el que no los tiene satisfechos, los errores que pudieron haberles cambiado el curso de la vida, lamentando no haber tenido la suficiente osadía, valor, inteligencia, visión, para haber identificado a tiempo los peligros y oportunidades, para huir de unos y aprovechar las otras.



En sexto lugar porque no se concentran en lo que tienen, sino en lo que perdieron (tiempo, juventud, dinero, oportunidades). El pasado es fácil de evaluar y obedece a una lógica predecible, vista después de que todo ocurre, con la información completa y sin el afán del momento. Predecir en cambio es muy difícil, especialmente si se trata del futuro, visto con la miopía del presente y el rencor del pasado.



En séptimo lugar porque están tan acomodados a vivir resguardados en sus limitaciones que conciente o inconscientemente procuran mantenerlas pues les sirven de excusa, de razón para no tener que comprometerse con nuevos resultados.







Como entonces mejorar la autoestima?



1. Actuando.



En la medida en que decidas hacer cosas, comprobarás que puedes lograr resultados positivos con gran frecuencia, de tal forma que cuando algo salga mal, estarás más dispuesto a corregir, adaptar y reintentar. La actuación consciente y constante aumentará tu confianza, los logros sean positivos o no, te darán el valor para seguir.



2. Dejando escapar el pasado



Lo que hayas logrado o dejado de hacer en el pasado, es del pasado y no puedes hacer nada para cambiarlo. Si fue bueno, ya recibiste la recompensa y si no lo fue, ya habrás recibido el castigo o habrás sufrido las consecuencias. Quedarse recordando el pasado evitará que emplees el presente para mejorar el futuro, así mañana nada habrá cambiado.



3. Aprendiendo



Se aprende tanto de la experiencia positiva como de la que no resultó exitosa. Cada vez que falles, habrás aprendido una forma no correcta de hacer una cosa, así que si aprendes no volverás a intentar algo que ya sabes que no funciona. Si tienes éxito y suficiente información que te permita repetir lo que hiciste bien, también habrás aprendido.



4. Aislando el ruido



Escuchar es necesario, pero no se debe dar valor a todo lo escuchado, solo a aquello que una vez evaluado contenga elementos que sirvan para el objetivo de tu vida. No debes danzar al vaivén de lo escuchado, solo danzar cuando la melodía valga la pena y se ajuste a lo que esperas colaborando a obtener tu resultado.



5. Siendo benévolo con tigo mismo



Si te has equivocado y puedes remediarlo hazlo pronto, en caso contrario no sufras, el sufrimiento no cambiará las cosas que pasaron, pero si dificultará las que vendrán. Trátate con cariño, siente por ti el mismo cariño que sentirías por alguien muy querido, no te cobres varias veces por lo mismo, con que aprendas y aceptes las consecuencias ya habrás pagado, acepta el pago y superalo.



6. Perdonando



Olvidar es difícil y muchas veces no es posible. Pero perdonar es una acción necesaria, perdonar implica aceptar las cosas que pasaron y no guardar rencor alguno por sus consecuencias. Perdonar implica dejar de hacer inventario, empezar de nuevo. No has perdonado si cuando alguien te defrauda, le recuerdas todo lo que ya le habías perdonado, eso solo te llenará de más frustración y seguramente considerarás que la reincidencia requiere medidas más fuertes, perderás amigos, tranquilidad y aprecio y el problema seguirá sin ser solucionado.



7. Escúchandote.



Tu intuición viene del inconsciente, cuenta con mucha información, parte transmitida por herencia genética, otra aprendida sin que lo notaras, gracias a los sistemas automáticos de tu cerebro y cuerpo. La intuición tiene un nivel más alto de pensamiento, no necesariamente debe ser racionalizada. La intuición es algo así como un sistema reflejo de tu pensamiento, actúa para protegerte, advertirte y ayudarte, confía en ella, escucha tu interior, solo así aumentarás tu confianza.



8. Preparándote



Si adquieres las destrezas necesarias para realizar mejor tu trabajo o las actividades diarias de tu vida, empezarás a sentir que no requieres la aprobación de otros, tomarás tus propias decisiones, confiarás más en tus talentos. Si empiezas a tomar tus decisiones, asumirás también la responsabilidad por ellas, con ello tu confianza crecerá y también tu independencia, serás capaz de emanciparte.



Conclusión



Es poco probable que los demás tengan genuino interés en ocupar su tiempo evaluando en forma permanente lo que tu haces, dices o muestras, acaso tu lo haces?, o conoces a alguien que lo haga?. Probablemente pocas veces lo haces a menos claro está que tengas baja autoestima e interactúes con alguien que te genere aprehensión, en este caso estarás pendiente de lo que hace y dice, pero no para evaluarlo sino para evaluarte en comparación con esa persona a quien seguramente consideras superior a ti.



Tratar de interpretar con tus propias herramientas lo que otros piensan es como tratar de manejar el carro de tu vecino desde la sala de tu casa y sin tener ninguna comunicación con el. Seguramente lo que hagas estará equivocado.



La intención es lo que vale, es una frase que escucharás con frecuencia, pero en realidad la intención por si misma no vale nada, valen las acciones que nacen a partir de tal intención, intención sin acción no es nada. No trates de encontrar mensajes ocultos en todo lo que quienes interactúan con tigo, hacen, dicen o muestran, empieza a creer que la mayoría de las personas son congruentes; dicen lo que quieren decir, hacen lo que quieren hacer y muestran lo que quieren mostrar y no que elaboran rebuscados planes para esconder mensajes secretos tendientes a enviarte recados en clave para evitar que tu los entiendas, eso solo sucede en las películas de espías, poco en la vida real.



Piensa en la paradoja de la baja autoestima:



Crees que eres poco valioso y sin embargo estás convencido de que otros se tomarán el trabajo de fijarte en todo lo que haces, si en realidad vales tan poco incluso para ti, deja de preocuparte, para los demás valdrás un poco menos, así que no hay riesgo de que a alguien le importes.



Si lo analizas tu baja autoestima tiene origen en lo que otros opinan u opinaban de ti en el pasado, tus padres, tus hermanos, los compañeros de clase, una pareja, un enemigo. Alguien que se tomó el trabajo de hacerte creer que no vales, que no eres inteligente, que no eres bien parecido, que no eres linda, que no eres … no eres… no eres….,



Como puede saber alguien lo que eres o no, si tu mismo aún no lo sabes? Y aunque pudiera saberlo como puede decidir lo que puedes ser o no?, Y si valías tan poco porqué dedicó su tiempo y esfuerzo en descalificarte?. No será que acaso el o ellos sentían que valían menos que tu y para nivelarse decidieron rebajarte?



Igualmente la alta autoestima nació en el aprecio y la aprobación que te mostraron los demás, cada manifestación de aprobación reforzó el concepto que tenías de ti mismo, así como cada desaprobación refuerza el concepto que alguien con baja autoestima tiene de si mismo. En los dos casos no es la aprobación o desaprobación lo que importa, sino como ello coincide con el concepto que tu quieres reforzar y que te hace ver como acertado con mayor facilidad lo que coincide con lo que crees.



La autoestima es un concepto personal, está basada en creencias, acertadas o equivocadas, pero en todo caso auto aceptadas, lo que facilita que una vez interiorizadas las tomes y apliques como propias sin mayor cuestionamiento. No existe una medida de auto estima colectiva, el reconocimiento que una persona tenga en la comunidad no necesariamente implica que se tenga aprecio, pero seguramente la autoestima de cada uno de ellos si está determinada por el grado de influencia que ejercen sobre grandes comunidades; sin embargo hasta ahora nada hay que indique que el hecho de ser reconocido e incluso estimado por los demás tenga relación directa con cantidad de estimación que uno tiene de si mismo. Muchos casos se conocen de personalidades de la farándula o del espectáculo, que gozan de gran estimación entre sus fanáticos y que sin embargo terminan en las drogas, el alcohol y la soledad debido a que la idea que ellos tienen de si mismos no les permite estimarse siquiera una pequeña parte de lo que los estiman sus seguidores.





Sin excepción, todos hacemos cosas bien y también hacemos cosas equivocadas, y si las que hacemos bien no coinciden con la idea que tenemos de nosotros, las atribuimos a la suerte y el azar y no a nuestra capacidad, si las que hacemos mal no coinciden con la idea que tenemos de nosotros, las tomaremos como simples cosas que resultaron mal, pero si coinciden ayudarán a reforzar la idea que tenemos de lo que supuestamente somos.



Si crees que no eres bueno en algo o para algo en particular, cada vez que tengas que enfrentarte a la tarea, en lugar de concentrarte en desarrollarla en mejor forma, te concentrarás en lo mal que puedes estarlo haciendo, en lo difícil que resulta y en esperar el momento en que fallarás. Tu mente se concentrará en esperar el error en lugar de buscar la solución y aumentará la probabilidad de fallar.



Piensa en un ciclista a quien le han entregado una nueva bicicleta que ha demostrado no ser confiable y que puede fallar en cualquier momento, por estar concentrado esperando el momento en que ocurrirá la falla no se concentrará en aprovechar su esfuerzo para avanzar y llegar a la meta, puede ser que la bicicleta funcione bien el tiempo necesario para completar la carrera, pero seguramente no llegará de primero y no hará su mejor esfuerzo ya que desde el principio sabe que no vale la pena intentarlo.

Por duro que sea el desafío, que tal si en lugar de pensar que es imposible, piensas en como lo harías si fuera posible, talvez encuentres como resolverlo.

coaching o consultoría?

El coaching es un método de trabajo que se apoya en una amplia y efectiva colección de recursos provistos por el COACH, para apoyarte en el logro de resultados extraordinarios con base en tus propias metas. Se enfoca en las habilidades y acciones necesarias para producir en forma rápida resultados relevantes para tu vida.


El Coach trabaja como un observador activo, provee múltiples herramientas de aprendizaje, de autoconocimiento y desarrollo que Tu, podrás usar en el futuro para resolver tus desafíos.

El Coaching trabaja sobre tus objetivos específicos y te ayuda a plantear retos y acciones concretas orientadas a desarrollar tu potencial para establecer el camino entre lo que es tu situación actual y lo que quieres llegar a ser en el futuro.

El término Coach, viene heredado de los entrenadores deportivos, ya que los primeros procesos de coaching que se ofrecieron, lo fueron en ese campo, sin embargo aún en los deportes existe gran diferencia entre un entrenador y un coach.

El coaching es más acompañamiento que entrenamiento.



El entrenamiento procura el desarrollo de destrezas y habilidades mediante la enseñanza, la práctica, la dirección y la instrucción, con el propósito de lograr un objetivo específico, establecido por el proceso, no por el entrenado.



El coaching procura el desarrollo de las personas mediante el aprendizaje, el crecimiento interior, el aumento de la responsabilidad, la plena conciencia de sus actos y la definición clara de las metas, objetivos e intereses del coachee, los cuales no se establecen como del proceso sino que se establecen con plena libertad por el cliente.



El coaching es un método de trabajo que ha demostrado ser útil para el desarrollo de las personas y para alcanzar logros extraordinarios, se apoya múltiples herramientas que te ayudan a analizar y hacer conciencia de las cosas que haces, de las creencias en que te soportas y de la forma en que puedes potenciar tu desarrollo, salir de los límites que te has impuesto y estimular tu creatividad para retarte a avanzar más allá de barreras que te has impuesto o aceptado.



Dada la popularidad que tiene esta disciplina y los buenos resultados que provee para quien lo usa, muchos consultores, asesores e instructores, sin formación como coaches, se han dedicado a ofrecer con la etiqueta de Coaching, servicios de consultoría, asesoría y enseñanza, Obviamente el resultado en este caso es el un proceso normal de “aprendizaje”, en donde el consultor dirige al cliente hacia un resultado que el mismo prevee desde su condición de experto. El consultor aparece como el sabe, enseña, presenta, dirige, mientras el cliente debe aprender de acuerdo al plan diseñado por el entrenador. Resulta un proceso costoso por la enseñanza pero poco valioso dado el bajo nivel de aprendizaje.







Un entrenador te dirá cual es el objetivo.

Un coach ayudará a que definas y trabajes en el tuyo propio.



El entrenador te enseñará la manera correcta de hacer mejor las cosas.

El coach te observará y apoyará para que descubras la forma más adecuada en que tu puedas hacerlas.



El entrenador te mostrará cual es el camino.

El coach te ayudará a remover los obstáculos para encontrarlo.



El entrenador asumirá la responsabilidad por los buenos resultados y te culpará por lo que no obtengas.

El coach te hará responsable de los logros obtenidos.



El entrenador se llevará el crédito por los triunfos.

El coach celebrará tus triunfos y te dará todo el crédito.



El entrenador te enseñará el sistema y exigirá que te acomodes al mismo.

El coach te ayudará a descubrir el mejor sistema animándote a probar con elementos nuevos.



El entrenador se soportará en experiencias pasadas exitosas.

El coach te ayudará a identificar lo que falta para que logres lo que esperas sin hacer énfasis en el éxito o fracaso del pasado..



El consultor te brindará muchas respuestas,

El coach te hará muchas preguntas.





Las personas y empresas que buscan aprendizaje a través de la enseñanza recibida de terceros contratarán consultores, los consultores aplican su know how, para incrementar la eficiencia, mejorar los procesos y obtener resultados, especialmente sobre la base de la automatización y el control.



Las personas y empresas que quieren mejorar los resultados a largo plazo, buscan el apoyo de coaches, desarrollarán mejores sistemas para hacer las cosas basados esencialmente en el crecimiento, la responsabilidad y el aporte conciente de las personas.



En el primer caso aprenderás a hacer las cosas con base en la experiencia de otros, con sus sistemas, sus recomendaciones, su metodología y la definición de lo que en su opinión sería el resultado ideal.



En el segundo caso aprenderás a trabajar en equipo, a delegar autoridad suficiente, a desarrollar personas, a confiar en sus capacidades y hacerles responsables de sus realizaciones o de la falta de ellas, no enseñarás, sino que estimularás el aprendizaje.



En el primer caso te esforzarás en encontrar soluciones y comunicarlas adecuadamente, es decir darás un producto terminado, estarás entregando el pescado. Un consultor te dirá como solucionarlo aunque a veces no estés en condiciones de implementarlo.



En el segundo caso permitirás que el equipo o la persona se esfuercen, serás un mentor, apoyarás y acompañarás el camino, estimularás la creatividad, recompensarás el esfuerzo, dirás a donde quieres llegar y dejarás que el equipo construya su propio camino, enseñarás a pescar, a buscar respuestas y soluciones..



Un coach te acompañará hasta encontrar la solución satisfactoria bajo tu responsabilidad, con tus posibilidades y desafíos y te estimulará a implementarlas.



El coaching y la consultoría son en escencia diferentes, pero pueden utilizarse en forma complementaria. A través de la consultoría se puede acceder rápidamente al conocimiento de expertos, y a través del coaching se puede aprender a aprender e implementar con facilidad sus recomendaciones. Lo que no se debe permitir, es que un consultor realice las funciones de un Coach, pues pesar de que el problema quede en el momento resuelto, no se habrá conseguido el cambio interno y el crecimiento necesario.


Una buena pregunta es aquella que obtiene una buena respuesta. El consultor te dará una buena respuesta aunque no corresponda a tu pregunta. El Coach te hará una buena pregunta para que encuentres tu propia y adecuada respuesta.

Cazando PISPIRISPIS

Cuentan que un hombre deambulaba incesantemente por las calles de una ciudad tratando con premura de atrapar algo, saltaba, corría, se lanzaba, buscaba, corria, saltaba, iba y venía tratando de atraparlo.

Un curioso del lugar le preguntó que era lo que hacía


- Estoy cazando pispirispis, fue su respuesta.


Puede indicarme como es uno para ayudarle?


- Y cómo voy a saberlo si aún no consigo atrapar el primero.!



Muchas personas van por la vida con gran afán tratando de llegar, sin saber a donde se dirigen, de esa forma siempre estarán de afán y muy lejos de cualquier lugar, incluso puede ser que avancen hacia o vayan en sentido contrario, que retrocedan parte de lo que habían adelantado, que pasen cerca de sus oportunidades sin reconocerlas, o que gasten demasiada energía y esfuerzo en el camino y sin por causalidad llegan a alguna parte, estén tan cansados que ni siguiera puedan disfrutarlo.

Si no saben lo que buscan jamás podrán encontrarlo, emplearán la mayor parte de su energía y dedicarán su tiempo a preocuparse por que no logran objetivos, sin saber siquiera reconocerlos. Si no sabes cual es el objetivo, como podrás reconocerlo, como sabrás que hacer, hacia donde avanzar y que obtener?


Dedica un poco de tu tiempo a planear, a identificar lo que quieres lograr, a reconocer lo que necesitas, a rodearte de quienes pueden ayudarte a obtenerlo, de esta forma estarás cazando mariposas, búfalos o cocodrilos u obteniendo resultados concretos en lugar de pasar la vida cazando pispirispis

Cómo negociarás a lo largo de tu vida?

Pocas cosas serán posibles en absoluto y total aislamiento, sea que te guste o no, tendrás que compartir con otros en casi todas las actividades que emprendas. Desarrollar suficiente tolerancia te permitirá entender y ayudará a aceptar su existencia y facilitará convivir con sus diferencias.

Definir lo que quieres, lo que puedes aceptar y lo que no negociarás será el primer paso. Se suficientemente específico como para que no todos las personas puedan ser un candidato potencial, pero suficientemente amplio como para que pueda haber algún candidato.

Regresa a cuando tenías 15 años:

Para entonces no seguías un libreto, solamente eras y dejabas que los demás te conocieran.

Para entonces no eras tan predecible

Para entonces dejabas tiempo a la improvisación

Para entonces no buscabas explicación racional a cada cosa.

Para entonces no importaba si algo salía mal, volvías a intentarlo y ya,

Para entonces el tiempo alcanzaba, y si no era suficiente, pues simplemente lo ajustabas.

Para entonces no le cobrabas a los demás tus frustraciones.

Para entonces a pesar de cualquier contratiempo podías recuperar la sonrisa en unos minutos.

Para entonces agradecías todo a la vida, por pequeño que fuera lo que recibieras.

Para entonces mirabas al cielo y pensabas en luna y estrellas.

Para entonces te quedaba tiempo para ser romántico.

Para entonces la prioridad no era el dinero.

Para entonces una rosa era poesía.

Para entonces una llamada no era interrupción.

Para entonces no estabas afanado por definir situación alguna, solo la vivías.

Para entonces solo la vida importaba, vivirla era suficiente.


Y tu


Que es lo que quieres lograr?

Que cualidades debe tener?

Que puedes negociar?

Que no es negociable?


Permítete el tiempo suficiente para que te conozcan antes de empezar a exigir, deja que se enamoren de ti, pero se lo más sincero posible, que se enamoren de ti no del rol que interpretas para agradar.

Dale tiempo al tiempo, las cosas no por apresuradas resultan más rápido y generalmente no son mejores, disfruta de la conquista y de la espera, puede ser que valga la pena.


Sé como el pescador que vive al lado de un tranquilo lago, en donde abundan los peces. Todas las mañanas va con su caña a pescar, espera pacientemente y cuando uno pica, recoge la cuerda sin afanes, espera hasta que su presa se cansa, luego la saca, la revisa y si encuentra que no es adecuada la devuelve al lago y vuelve a empezar hasta que ha pescado suficiente.

No seas como el pescador que vive a la rivera de un olvidado y pobre río en donde no hay casi nada que pescar, de modo que pasa días enteros sin lograr nada, aguanta hambre y muchas necesidades. Cuando divisa una presa, sea la que sea, intenta con afán por todos los medios atraparla, casi siempre falla y ahuyenta aún más la pesca de esas aguas.

Muestra lo mejor de ti desde el comienzo, quizá eso sea lo más importante y por ello te lleguen a apreciar y a amar, de forma que cuando conozcan de ti lo malo, haya suficientes motivos que valorarte para que el resultado salga a tu favor.

Recuerda que solo se ama lo que se admira, haz que te admiren, así te amarán.

No olvides que solo cuando seas la mejor opción, tendrás el lugar asegurado, haz que haya suficientes razones para que sea difícil reemplazarte, así tendrá un lugar ganado.

Busca a alguien que tenga lo que quieres, no esperes cambiarle, puede ser que lo logres pero igual puede ser que falles, mejor entonces si de una vez buscas a quien te guste como es, así dedicarás la energía a consolidar la relación, no a ajustar a la persona a tu acomodo.

Ponte una meta grande, no que la conquista lo sea todo, de esta forma seguirás luchando aún cuando tengas éxito. Recuerda que lograr un objetivo no es el comienzo, es el final de un camino, asegúrate de que después de lograrlo te queden aún motivos.

jueves, 28 de octubre de 2010

Un mensaje de vida para reflexionar y cambiar

Esta es una carta con mucho contenido, si ya la conoces te invito a recordarla, si no la has leído tómate un momento para hacerlo, ojalá te  produzca algún buen efecto.  



El texto fue escrito por GEORGE CARLIN (Su esposa murió recientemente).No es sorprendente que George Carlin, comediante de los años 70 y 80, pudiera escribir algo tan elocuente.



UN MENSAJE POR GEORGE CARLIN:



La paradoja de nuestro tiempo es que tenemos edificios mas altos y temperamentos mas reducidos, carreteras mas anchas y puntos de vista mas estrechos. Gastamos mas pero tenemos menos, compramos mas pero disfrutamos menos. Tenemos casas mas grandes y familias mas chicas, mayores comodidades y menos tiempo. Tenemos mas grados académicos pero menos sentido común, mayor conocimiento pero menor capacidad de juicio, mas expertos pero mas problemas, mejor medicina pero menor bienestar.



Bebemos demasiado, fumamos demasiado, despilfarramos demasiado, reimos muy poco, manejamos muy rápido, nos enojamos demasiado, nos desvelamos demasiado, amanecemos cansados, leemos muy poco, vemos demasiado televisión y oramos muy rara vez.



Hemos multiplicado nuestras posesiones pero reducido nuestros valores. Hablamos demasiado, amamos demasiado poco y odiamos muy frecuentemente.



Hemos aprendido a ganarnos la vida, pero no a vivir. Añadimos años a nuestras vidas, no vida a nuestros años. Hemos logrado ir y volver de la luna, pero se nos dificulta cruzar la calle para conocer a un nuevo vecino. Conquistamos el espacio exterior, pero no el interior. Hemos hecho grandes cosas, pero no por ello mejores.



Hemos limpiado el aire, pero contaminamos nuestra alma. Conquistamos el átomo, pero no nuestros prejuicios. Escribimos mas pero aprendemos menos. Planeamos mas pero logramos menos. Hemos aprendido a apresurarnos, pero no a esperar. Producimos computadoras que pueden procesar mayor informacion y difundirla, pero nos comunicamos cada vez menos y menos.



Estos son tiempos de comidas rápidas y digestión lenta, de hombres de gran talla y cortedad de carácter, de enormes ganancias económicas y relaciones humanas superficiales. Hoy en día hay dos ingresos pero mas divorcios, casas mas lujosas pero hogares rotos. Son tiempos de viajes rápidos, pañales deshechables, moral descartable, acostones de una noche, cuerpos obesos, y píldoras que hacen todo, desde alegrar y apaciguar, hasta matar. Son tiempos en que hay mucho en el escaparate y muy poco en la bodega. Tiempos en que la tecnología puede hacerte llegar esta carta, y en que tu puedes elegir compartir estas reflexiones o simplemente borrarlas.



Acuérdate de pasar algún tiempo con tus seres queridos porque ellos no estarán aqui siempre.



Acuérdate de ser amable con quien ahora te admira, porque esa personita crecerá muy pronto y se alejará de ti.



Acuérdate de abrazar a quien tienes cerca porque ese es el único tesoro que puedes dar con el corazón, sin que te cueste ni un centavo.



Acuérdate de decir te amo a tu pareja y a tus seres queridos, pero sobre todo dilo sinceramente. Un beso y un abrazo pueden reparar una herida cuando se dan con toda el alma.



Acuérdate de tomarte de la mano con tu ser querido y atesorar ese momento, porque un día esa persona ya no estará contigo.



Date tiempo para amar y para conversar, y comparte tus mas preciadas ideas.



Y siempre recuerda:



La vida no se mide por el número de veces que tomamos aliento, sino por los extraordinarios momentos que nos lo quitan.



George Carlin.

martes, 5 de octubre de 2010

El cazador de estrellas!

Una tarde, caminando por la playa observé a un hombre que se agachaba a cada momento, recogía algo de la arena y lo lanzaba al mar. Hacía lo mismo una y otra vez.

Tan pronto como me acerqué me di cuenta de que lo que el hombre agarraba eran estrellas de mar que las olas habían dejado en la arena y una a una las devolvía de nuevo al mar.

Intrigado pregunté que estaba haciendo.

- Estoy lanzando estas estrellas de regreso al mar. La marea las deposita en la arena y ellas se han quedado varadas a la orilla, si no las regreso inevitablemente morirán.

Entiendo, le dije, pero hay cientos, tal vez miles de ellas en esta playa. No puedes devolverlas todas. Tal vez no lo has pensado pero lo mismo sucede a lo largo de miles de playas en todas las costas, tu no alcanzas a regresar siquiera a las que se varan en esta playa es poco para ellas. Tu esfuerzo no tiene sentido!

El hombre solo sonrió mientras arrojaba otra estrella al mar y luego respondió:

- Para muchos tal vez no, pero para ésta si lo tuvo!



Moraleja: Algunos de tus esfuerzos quizá no sirvan para solucionar los problemas del mundo, pero pueden servir para hacer feliz a alguien que esté a tu lado, no dejes de hacerlos.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

El aprendiz de arquería. Una historia sobre la responsabilidad y el exito

Adaptarse para  tener exito!

Aceptar que puedes aprender te preparará para adaptarte el cambio. Si crees que todo lo sabes, ten presente que el mundo que dominas quizá ya no existe y del nuevo ni siquiera te has dado cuenta. El aprendizaje continuo requiere un gran sacrificio de tu ego, el dirá que eres un experto y tu querrás creerle, pero solo quien es consciente de que le falta aprender se interesará en hacerlo.

Cuantas veces te habrás dedicado a luchar contra la corriente, tratando de que la situación sea ideal para ti, de que otros acepten como válidos solo tus puntos de vista y estén de acuerdo en modificar todo lo que no conviene a tu idea de cómo deben ser las cosas. Cuanto desgaste de energía, cuantas discusiones vanas y cuantos desacuerdos y al final… casi nada.  La adaptación es también una forma de aceptar la responsabilidad por tus actos.  No puedes seguir culpando a otros, a las circunstancias y a la suerte,   ese es el mundo que tienes para disfrutar y en iguales condiciones unos triunfan y otros fracasan.

Te invito a leer este tradicional cuento llamado ” El aprendiz de arquería”, quizá encuentres puntos de reflexión que te ayuden a aceptar con nobleza lo que no puedes cambiar y adaptarte más rápido, antes de que lo hagan los demás, para sacar ventaja de las situaciones.  Es también una lección sobre la responsabilidad


Buena suerte con tu lectura, aunque la historia es un poco larga valdrá la pena dedicarle el tiempo suficiente.



Así va la historia…

El viento soplaba fuerte y frío, creando pequeños remolinos de hojas a la par que erizaba la piel del joven muchacho esparciendo el olor de su esfuerzo muscular al tensar el enorme arco. El cielo gris tampoco ayudaba mucho.



Por qué no podían apartarse esas nubes del cielo?




Con tan poca luz casi no podía ver a su blanco. En su opinión habían escogido muy mal donde situar la pista de prácticas, ese cerro era escalofriante y parecía que el viento gustaba de burlarse del aprendiz de arquero. Además estaba convencido de que la diana estaba torcida.



Como pretendían que aprendiese así ? No era posible acertar en ese blanco!



La flecha zumbó velozmente por entre los árboles, bella como un águila surcó el cielo para... fallar por casi una braza entera!



- Agghhh! - rugió de rabia Tao Tseng - En estas condiciones no hay quien acierte! Es imposible!

La bella entrenadora Lin Piu, miró sonriente al muchacho, sus negros cabellos estaban recogidos en una hermosa tiara dorada mientras que unos amplios ropajes parecían bailar ante la silenciosa música que el travieso viento tocaba contra sus delicadas líneas femeninas.

- De verdad crees que es imposible Tao Tseng ? - y antes de que el aprendiz pudiera responder, agregó - Por que lo crees así ?

- Lin Piu, es obvio, creo yo -contestó el aprendiz, feliz de poder ser útil al marcar todos los defectos de la pista de entrenamiento, y poder ayudar así a solucionarlos y facilitar el adiestramiento de todos los arqueros que fueran detrás de él.







Quien construyó esto no se dio cuenta de que este cerro no es precisamente el mejor lugar para una pista de entrenamiento de arqueros. Aquí el viento es irregular y caprichoso, te despista de tu objetivo. Además hay poca luz, con lo que el blanco se ve mal.



Y a quién se le ocurrió poner la diana entre los árboles ?.







El movimiento de las ramas distrae mucho. Creo que si alguien los podara, sería todo mucho mas sencillo.



Ah! -agregó suspirando- y la diana no esta recta del todo, sino que esta un poco torcida a la derecha, eso hace que una flecha que le diese pudiera fallar el blanco. Si alguien lo corrigiese, entonces si podría dar en la diana. Si no es imposible!!



A quien se le ocurrió poner esta pista aquí? Sin duda no sabia mucho de arquería!







Lin Piu rió dulcemente, su risa era como una hermosa melodía al son de la cual bailaba todo su hermoso cuerpo. Tao Tseng habría jurado ver danzar el espíritu de la bella arquero debajo de los amplios pliegues de su blanco kimono.







- De verdad crees que quien puso esto aquí no sabia nada de Arquería ? -preguntó casi como para si misma-. Pues quizás tengas algo de razón, pero sin duda sabia mucho del corazón humano.







Y acto seguido Lin Piu arrebató el gran arco de las manos del sorprendido joven y



tomando una de las flechas clavadas en el suelo delante de él, la tensó y apuntó con una rapidez y destreza sin igual. La mujer solo apuntó un momento, pero Tao Tseng jamás olvidaría la expresión de esos ojos, normalmente vivarachos, seductores, y casi traviesos. Ahora estaban impresionantes, parecían absorber la esencia de todo lo que les rodeaba... a la par que se centraban en un solo y único punto.







Todo tardó menos de lo que Tao Tseng podía usar en tomar aire, y entonces la flecha ya estaba ahí, perfecta, precisa, en el justo centro de su diana, tal y como si siempre hubiera pertenecido a ese lugar.







- Te das cuenta ahora Tao Tseng ? -dijo la entrenadora-. Los fallos exteriores no importan, las circunstancias son irrelevantes, solo lo que hay en interior importa.







Tao Tseng se quedó maravillado con -literalmente- la boca abierta, jamás habría esperado ver tanta destreza ni una sabiduría semejante en una mujer tan joven y hermosa.







- Que quieres decir ? -balbuceó finalmente.







- Pues simplemente que todas esas cosas que me has dicho no importan. -dijo Lin Piu sonriendo con picardía-.







- Cómo que no importan? -se rebeló desde lo mas hondo Tao Tseng- Qué es eso de que no importan? Todo lo que yo he dicho son problemas gravísimos y reales que existen! Acaso no sabes mirar a tu alrededor y verlos? - dijo ofendido y con su amor propio tocado.







- Claro que los veo! -Contestó la Maestra en Arquería divertida- Esos y más! -ante la sorprendida mirada del joven, continuo- Tú no me has mencionado que las flechas están mal equilibradas, ni que el arco es demasiado duro pues ya es viejo y esta gastado. Tampoco has visto que el blanco esta más abajo que nosotros, lo que siempre es incómodo, ni que las hojas que revolotean con el viento pasan frecuentemente por delante de nosotros y la diana entorpeciendo la visión... ni unas cuantas cositas mas que nos hacen... como era? -y tras fingir ponerse seria para recordar con precisión, agregó: - Que hacen "imposible" dar en el Blanco.







Tao Tseng miraba fijamente la flecha, perfectamente clavada en su diana, debatiéndose internamente entre su joven orgullo masculino herido, y su admiración e increíbles ansias de aprender. Finalmente sus ansias de mejora pudieron sobre el rencor y repleto de una total admiración y aprecio, aceptó la lección de humildad y se preparó para aprender lo verdaderamente importante de la experiencia.







- Me estas diciendo que conoces todos los fallos? -pregunto con sencillez.







La hermosa mujer, viendo la total sinceridad en los ojos del joven, respondió en el mismo tono franco que él. - Todos... o casi todos -sonrió- aunque siempre hay algún aprendiz que me indica uno nuevo -su risa era como el dulce cantar de una paloma- no se como son capaces de dispersarse tanto, de esperar tanto!







- De Esperar? De Dispersarse? Que significa todo eso? -pregunto intrigado.







- Está todo relacionado -explicó ella- cuando la gente espera que las cosas sean de cierta forma, y no lo son, dispersa su concentración y sus energías en centrar inútilmente sus pensamientos en todos los fallos que no le gustan, y el desagrado que le crean, esa dispersión de sus recursos internos, les hace fracasar.







Tao Tseng tragó saliva, aún no lo entendía del todo, pero aquello había tocado una fibra sensible dentro de su ser.







- No entiendo bien lo que me dices -farfullo finalmente Tao Tseng- Qué quiere decir "Esperar"?







La mujer dudo unos momentos antes de contestar. Cómo podría explicarlo para que lo entendiera lo mejor posible?. Lo que le estaba explicando llegaba justo hasta el fondo de las más importantes hebras de la naturaleza humana... Cómo poder llegar hasta ahí sin chocar con los muros de los prejuicios y orgullo que sin duda habitaban en el joven igual que habitan en cada ser humano que respira y camina ?







- Quién decide si una persona Triunfa o no? -Preguntó finalmente la entrenadora dando un sabio rodeo para poder traer la más intensa luz de la comprensión en la mente y el corazón del joven. Tao Tseng dudó durante unos momentos, su mente le decía varias cosas contradictorias, pero su naturaleza era de arquero, así que acalló sus pensamientos y se centró totalmente en escuchar a su corazón.







- Ella misma -dijo al final-. Solo una persona decide si triunfa o no.- Cómo podría ser de otro modo?







Lin Piu aplaudió literalmente la sabiduría y el acierto del joven, pocos eran tan sabios e inteligentes como para dar una respuesta tan precisa y verdadera!







- Así es! -Dijo tan contenta que le espetó un beso de recompensa en la mejilla del joven y, posando su brazo como si fuera un camarada de batalla y agregó -Eres muy inteligente e intuitivo Tao Tseng, pues has sabido ver y aceptar la mayor de las verdades de esta vida, que solo uno mismo decide si triunfa o no.







La mujer hizo un silencio y luego continuó.







- Hagamos un juego, mi joven amigo, vamos a hablar rápido, yo te hago una pregunta y tu me respondes rápido. De acuerdo?







- De acuerdo! -Contestó el joven.







- Quien decide si una persona triunfa o no?



- Ella misma -Respondió Tao Tseng con una sonrisa de triunfo.



- Quien decide si yo triunfo o no?



- Tú misma -respondió Tao Tseng orgulloso de sus buenas respuestas.



- Quién decide si tú triunfas o no?



- Yo mismo -contestó, aunque, en este caso le tembló un poco la voz. No es que dudara de la respuesta, Tao Tseng sabía que esa ERA la respuesta correcta y verdadera, lo que pasaba es que realmente le daba un poco de miedo la importancia que tal significado acarreaba sobre su vida.







- Quién decide pues si tú triunfas y das en la diana o no?







- Yo mismo -contestó el Joven arquero alargando cada una de las palabras, sabía que estaba diciendo lo correcto, pero no podía evitar sentirse como si hubiera caído en una trampa. La mujer sabia mucho más sobre el corazón humano de lo que nadie habría considerado "cómodo" estando en su presencia, así que el aprendiz no pudo evitar temblar cuando Lin Piu sencillamente le espeto.







- No te sientes ahora mismo como si hubieras caído en una trampa? –Preguntó sonriente.







- Ciertamente si -contestó balbuceando él.







- Esta, mi joven amigo, es la "Trampa de la Vida"



.



Tao Tseng encontró ahora algo más poderoso en su interior que esa sensación que parecía fascinarle y revolverle el estómago a la vez, y fue la fuerte necesidad de aprendizaje que siempre le dominaba.







- La Trampa de la Vida -repitió el- Fascinante... Que quieres decir exactamente con eso?







- Es más sencillo de lo que parece - dijo ella - de pequeños se nos explica que la vida es dura, y es cierto, no sabes cuanto lo es! -explicó ella seria y feliz al mismo tiempo- La vida es inmensamente dura porque nos ha dado a todos y cada uno de nosotros la mayor de las cargas, la carga de la "Responsabilidad de Nuestras Propias Vidas".







- Honor -murmuró el joven identificado con el sentimiento.







- Puede ser -dijo ella- y si no es eso, si algo muy parecido y quizás hasta más poderoso







-el joven escuchaba extasiado-.







- Cuando a la gente le dicen que la vida es dura, se echan a temblar y a pensar que las mayores desgracias se abatirán sobre ellos -su hermosa cara tenia una peculiar sonrisa - no se dan cuenta de que la dureza de la vida es algo aun mayor que todo eso, es la Responsabilidad. El saber dentro de nosotros que en realidad, y después de apartar todas las telarañas de excusas que queramos poner para no poder ver lo que es cierto, solo existe una verdad, y es...







Que cada Persona, es la única que decide si Triunfa... o no.







Tao Tseng estaba entendiendo más de lo que quizás desearía, así que cerró los ojos para poder asumir mejor la enorme carga sobre sus hombros y preguntó.







- Quieres decir que el éxito en la vida es una cuestión de Decisión y responsabilidad ?







- Así es, mi pequeño amigo. Fíjate en el tamaño de esta verdad y comprenderás por qué, en su inmensidad, aun las más grandes culturas sólo pudieron aceptar y comprender pequeñas partes de su totalidad. Quizás pueda parecer que esas pequeñas partes se contradicen, pero igual que una pata de un Elefante es una parte, de la misma forma que lo es su trompa o su cola, todas son parte de la figura total, y no podemos juzgar la Gran Verdad sólo por una de las partes, solo por la Totalidad de la misma.







- Dime, antes me respondiste bien y me dijiste que Solo "Tu" decides si Triunfas... o no. - Dijo ella recalcando los hechos- así pues, sólo tú decides si acertarás en la diana... o no. O si amas... o no. O si ganas dinero... o no. O cualquier cosa!! Pero no nos distraigamos de lo que nos interesa, la cuestión es que el único decide si acertaras o no en la diana... Quién es?







- Yo mismo -contestó Tao Tseng, el aprendiz de arquero.







- Así es. -y agregó- así pues, dado que solo tú decides si aciertas o no aciertas en la diana, eso quiere decir que Las Circunstancias son Irrelevantes! Te das cuenta de eso?







Tao Tseng dudó antes de contestar.







- Si eso que me dices es cierto... entonces tu acertaste en la diana porque decidiste hacerlo así, verdad ?







- Así es -Contestó ella







- Pero eso también quiere decir que yo fracasé, no le di a la diana, porque así lo decidí y no por el viento, las sombras o las flechas mal construidas -dijo torciendo la cara en una mueca de disgusto.







- Así es -confirmo la chica - Pero... Por qué lo hiciste?







Tao Tseng no lo sabía, no dudaba ahora que había fracasado porque así lo había decidido, cierto es que con todo su ser deseaba echarle la culpa a otra cosa, pero sobre todo era un arquero de Honor, y eso quería decir que reconocía sus propios fallos. Así que intentó descubrir por qué.







- Te ayudaré -dijo la joven-.







El Problema no está en tus pensamientos conscientes, sino en esa parte de tu mente que trabaja sin que tu seas consciente de que lo hace, como cuando respiras, haces que tu corazón lata, o mueves una mano rápidamente por reflejo. –







Hizo una pausa para que el aprendiz entendiera sobre que estaba hablando y continuo-







La cuestión es que tú tienes una costumbre que todos tenemos, y es la de hacer Juicios y Prejuicios. Los Prejuicios son opiniones sobre lo que deberían ser las cosas antes de tener datos suficientes para tomar una opinión bien fundamentada.







Pues bien, cuando tú entraste en la zona de prácticas, te habías creado en tu mente una idea de como seria todo. Tú "esperabas" que todo fuese de cierta manera... pero resultó que las cosas no eran tal y como esperabas. Así que acto seguido te pusiste a identificar como "malo" todo lo que no coincidía con tu opinión de como deberían ser las cosas y lo marcabas mentalmente como un "error" que debería ser corregido.







Por qué?... Sencillamente porque tú querías que las cosas fueran tal y como tú te las imaginabas, como esperabas que fueran. Así que ese descontento que tenias dentro de ti identificó un montón de errores y emitió un Juicio, un Juicio que quizás no fuiste consciente de ello más que con un simple sentimiento interno, un pensamiento tan rápido que no puedes identificar con palabras, sino con un movimiento rápido de la mente, una sensación de disgusto, quizás como un malestar escondido en un músculo, fuera como fuera, ese Juicio era "Esta arquería está mal, nadie puede aprender aquí"







Tú, al "esperar" que las cosas fueran de una manera, y al ver que eran de otra, te negaste a aceptar como son en realidad. Esa negativa provocó ese Juicio en tu Interior. Y ese Juicio creo una decisión interna. La decisión de fracasar, de errar el tiro, para demostrarte internamente que tu juicio era el correcto, autoanfianzarte en tu interior de esta manera y quizás hasta llamar la atención sobre los demás para que corrigieran todos los errores.







Te das cuenta ahora de que todo sucedió en tu interior tal y como te digo?







Tao Tseng asintió avergonzado.







Pero no te preocupes mi amigo, esto ocurre en el interior de todas las personas y normalmente este proceso es el causante de todos los fracasos, simplemente la persona se convence de que las situaciones que le rodean sólo le pueden conducir al fracaso, y entonces internamente decide que va ha Fracasar, después, hace inconscientemente todo lo que está en su mano para hacerse fracasar a si misma, pues -sonrió- necesita saber que tenia razón.







- En cierta ocasión -comentó el joven tímidamente- escuché a dos Maestros arqueros hablando de términos parecidos... y lo llamaron... Cómo era? Ah, si! ENTUSIASMO!







- Exacto! -Exclamó complacida la hermosa Entrenadora- El Entusiasmo no es otra cosa que como te hablas a ti mismo, el como te relacionas contigo mismo en tu interior, el como funcionan tus pensamientos para formar las decisiones oportunas. Los que se hablan mal a si mismos, marcando los "errores" y los "fallos", sin duda lo que están haciendo es convenciéndose a si mismos de que tienen que Fracasar, y entonces se hacen Fracasar. Se frenan a si mismos con sus palabras al causarse decisiones negativas para si mismos.







- Pero - añadió el muchacho aún a riesgo de ser improcedente- pero esos errores realmente existían. Acaso si los dejo de ver no estaré errando en mi apreciación? No estaré faltando a la realidad ?







Las carcajadas de la mujer jamás podían haber sido mayores. - Esa es la excusa mas vieja de los fracasados mi joven amigo -al verlo ofendido añadió- perdona, no quería ofenderte, sin duda tú tienes talento de arquero, pero alguien en el pasado te metió esa idea, digna de un fracasado, en tu hermosa cabecita.En seguida comprenderás lo que quiero decirte. Imagínate que estás en un camino en medio del bosque, llamemos a ese camino "Vida", es de noche, esta oscuro y supongamos que enciendes una vela entre tus manos. Qué ocurrirá?







- Que se creara una luz, y podré ver mejor -respondió el joven.







- Seguro? -sonrió la Entrenadora- Sólo generarás una luz?







- Yo creo que si -dijo el joven.







- De acuerdo pues, ahora estás ESPERANDO, así que acompáñame -Y rápidamente le condujo hasta el almacén de los arcos, una pequeña caseta de madera bien cuidada, una vez dentro cerró todas las ventanas con sus postigos y atrancó la puerta creando una oscuridad casi absoluta. -Ahora Tao Tseng, enciende esta vela.







El muchacho así lo hizo, aunque no fue fácil en la oscuridad. En cuanto pudo encenderla, comprendió lo que la mujer había querido expresarle.







- Ahora lo veo -dijo al fin- la vela genera luz, pero al generar esa luz, también estoy



causando sombras.







- La vida es "dura" -sonrió ella- con cada vela no solo creamos una luz, sino que también generamos sombras, eso es así por definición, es la pura y dura realidad. Ahora imagínate que estás en tu camino de la "vida" y que decides encender esta vela. Bien, ahora tienes una luz que te puede iluminar el camino. Si usas esa luz, podrás llegar al final de tu camino con éxito. Pero... que ocurriría si te fijaras en las Sombras? Que verías?







- Supongo que Oscuridad -dijo el joven







- Así es, y qué ocurre si cuando estas caminando vas mirando la oscuridad?







- Pues que veré Sombras y Oscuridad... es decir, que no veré... y si no veo.. –pensó dubitativo- Tropezare y caeré.







- Así es: Si te fijas en las sombras de la vela, Fracasaras.







Tao Tseng estuvo en silencio durante mas de diez minutos dejando que tamaña enseñanza penetrara hasta en lo mas profundo de su mente.







- Así pues -dijo al fin- Para triunfar he de ignorar las sombras, y fijarme en la Luz, y usar la luz que tengo para alcanzar el éxito en mi vida. Verdad?







- Así es -dijo orgullosa la Maestra de su aventajado discípulo-







Así es mi arquero. Un arquero se fija en la Luz, mientras que los fracasados, se centran en las sombras. Por eso mientras los arqueros alcanzan el éxito y obtienen todo lo que desean en la vida... los fracasados se dan con las espinillas contra las duras rocas y se comen el barro mezclado con la furia y la rabia de su fracaso.







El joven meditó durante mucho tiempo sobre estas palabras.







- Pero yo sé de personas que han fracasado en sus vidas y que no son malas personas, sino buenas. Por qué les ocurre esto?







- No amigo mío -dijo Lin Piu maternal- son sólo personas que no han tomado la decisión de controlar sus vidas. Pero esa también es una decisión, la decisión de que otros controlen tu vida, y eso es algo que suele conducir al fracaso, pues... A dónde puede conducir la irresponsabilidad? El éxito no llega por casualidad, hay que decidir alcanzarlo y aplicar esa decisión con nuestro trabajo para triunfar.







Tao Tseng estaba ansioso por saber más sobre este tema, pues sentía que era una revelación suprema para él, sus intereses y su vida. Pero la información y la revelación estaba siendo tan enorme, que decidió guardar silencio durante casi cuarenta minutos para dejar que sus hombros se adaptaran a la nueva carga que portaban, una que siempre habían llevado pero que solo ahora reconocían como suya.







Lin Piu era Paciente, además de hermosa, y mientras el joven aceptaba el control de su vida e internalizaba el secreto del éxito, ella decidió disfrutar del momento y fue feliz simplemente mirando como se ponía el sol y sintiendo la suave textura de la fresca hierba bajo su piel.










• Este es un cuento tradicional de autor desconocido.

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viernes, 17 de septiembre de 2010

carta a mi jefe!

Carta a un jefe






Muy respetado señor Jefe:



Hoy cumplo 2 meses de estar laborando en esta empresa, bajo sus muy estrictas y ceñudas órdenes.



Como usted recordará fui escogido a través de un estricto y muy dilatado proceso de selección, el cual se encargó de descubrir la historia familiar desde la época en que mis antepasados obtuvieron la libertad de manos de los conquistadores a través de una insurrección armada, lo cual por supuesto restó varios puntos a la evaluación de mi personalidad al considerarme descendiente directo de personas poco afectas al cumplimiento de lo establecido y propensas a solucionar los problemas por las vías de hecho.



Debo eso sí, admitir que el proceso ayudó a probar gran parte de mis cualidades y descubrir mis defectos, por ejemplo encontré que si la motivación es suficiente y se junta con la necesidad, puedo tener una inagotable dosis de paciencia, bien sea para esperar una llamada durante más de 1 mes para citarme a un examen, puedo esperar sin exaltarme a que un examinador que nos citó para entrevista a las 8 a.m y que además muy diligentemente nos llamó a lista cinco minutos antes de esa hora, retirando del proceso a quienes por alguna razón no estaban presentes al llamado, se desocupe de atender la vida familiar, social, deportiva, afectiva, galante, emotiva y gastronómica e igualmente atienda primero las cosas más importantes como entrevistar sin cita previa a los recomendados de su jefe, amigos, esposa, secretaria, amante, hijos y conocidos, proceso que más adelante y gracias a la cultura política que desarrollamos de un presidente varias veces reelegido, se denomina meritocracia. Finalmente a las 5 de la tarde, solo 9 horas después de la cita, este ejecutivo importantísimo, usted mi gran jefe, delegó en su secretaria el pasarnos un cuestionario de 200 preguntas advirtiéndonos que teníamos 30 minutos para responderlas y que si para entonces no lo habíamos terminado, era mejor despedirnos del puesto, entendí entonces la valiosa enseñanza que el proceso mismo nos estaba dejando para el futuro trabajo bajo presión, agradecí muy especialmente su deferencia al estar pendiente de nuestro examen interrumpiendo nuestra concentración cada 5 minutos para advertir el paso del tiempo y lo poco que nos quedaba para terminar y por supuesto ayudándonos a medir el aprovechamiento con frases tan inteligentes como “quien no haya contestado en este momento por lo menos hasta la pregunta 70 es mejor que entregue y regrese a la vagancia porque el puesto es para pilosos”, después entendí el valor de los mensajes retadores que sacan lo mejor de nosotros para permitir que logremos las metas.



Para terminar el examen sonó un pito como de arbitro, después me enteré que usted lo era en los campeonatos del barrio y admiro su deferencia al prestarnos su experiencia en el tema para que el silbato fuera claramente escuchado y a tiempo, eso sí sin tiempo suplementario, otras dos personas se ubicaron estratégicamente en las esquinas posteriores del salón y se nos advirtió que al sonar el pito deberíamos dejar el papel y esfero sobre el escritorio y no intentar siquiera hablar con el compañero o escribir otra respuesta en la hoja, se que muchos le malinterpretaron como falta de confianza en nosotros pero en realidad era un muestra de organización y disciplina de su parte y una prueba de entereza para cada uno de nosotros.



Para no extenderme en detalles que por usted son bien conocidos, esperé 3 semanas más y fui citado a una entrevista en la cual ya solo estábamos uno 20 candidatos de los 260 del grupo general que inició el proceso, el grupo se completó con los 10 que por meritocracia habían sido enlistados, no seleccionados pues hasta aquí, de ellos no había ninguno retirado, imagino que tenían más capacidades y conocimientos que nosotros y por ello su deserción no había ocurrido.



Los 10 meritócratas, fueron invitados a desayunar, nosotros no, pero entiendo que para hacernos la vida más fácil pues fuimos citados 3 0 minutos más tarde que ellos, desafortunadamente el desayuno con ellos se juntó con el almuerzo en el club y nosotros haciendo gala de la paciencia debimos esperar hasta las 4 de la tarde, hora en que usted regresó a la oficina, y eso sí, debo reconocerlo haciendo un gran esfuerzo porque se le notaba cansado y a pesar de el tufo a vino del almuerzo, para no hacernos perder el tiempo, nos entrevistó a todos y cada uno por casi 5 minutos, admiro su capacidad de recordación, pues no tomó nota de nada y su gran concentración a pesar de que su secretaria insistía cada rato para pasarle una nueva llamada de las muchas que no había atendido durante el día y que usted haciendo gala de su don de gentes devolvió a pesar de lo ocupado que estaba con nosotros y de que muchas de ellas eran de amigas para invitarlo a cenar, a novena, a almorzar, a cine etc, las cuales usted a pesar de su importancia se dignó atender con la misma diligencia y hasta con más cortesía que las de negocios que por supuesto eran más importantes.



El caso es que después de 6 semanas un día recibí la tan anhelada llamada en que me indicaban que estaba entre los seleccionados para el training, para lo cual debía presentarme el siguiente Lunes a las 7 de la mañana, adjuntado:



Examen de sangre

Examen médico general

Examen de pulmones

Examen de orina

Examen de heces fecales

Pasado judicial

Certificado de la procuraduría sobre la no existencia de expedientes disciplinarios

Libreta militar

Cédula de ciudadanía

Tarjeta de eps

Declaración de renta de los 4 últimos años

Rut actualizado

4 fotos tamaño 4x4 fondo azul con corbata

3 recomendaciones personales

3 recomendaciones familiares

3 recomendaciones comerciales

3 referencias bancarias

hoja de vida en original y dos fotocopias

fotocopias de los diplomas

y otros documentos de los cuales ya no me acuerdo



Además debíamos llevar fotocopias de los certificados de notas de educación primaria, secundaria, técnica, universitaria, post universitaria, etc. autenticadas, eso sí debo agradecerle no haber hecho referencia a nuestra educación preescolar, porque debo admitir que debido a mi edad, en el momento en que inicié mi proceso educativo, los jardines infantiles no estaban debidamente organizados y yo, tuve que aprender a escribir números, vocales y el alfabeto de la mano de mi madre y abuela, que se turnaban para ayudarme a avanzar. Ahí no hubiera podido adjuntar ningún certificado y habría quedado relegado del proceso.





Training



No se porque esa palabrita me ha hecho pensar siempre en los instrumentos de tortura con que estiraban a los herejes en la inquisición halándolos de las extremidades con 4 caballos, aunque después de finalizar el proceso comprendí que mi subconsciente me había estado enviando mensajes de advertencia al respecto mediante esa analogía.



La sala de training a la cual fuimos citados los 2 seleccionados por el proceso normal y los 10 meritócratas estaba ubicada en el sitio mas remoto de las oficinas generales, dentro del almacén de materias primas, imagino que nosotros mismos éramos materia prima en bruto para fabricar productos finales con los atributos y cualidades que el proceso de calidad iso exige, allí nos ubicaron desde el primer día para hacer la inducción y luego todo el proceso de capacitación y entrenamiento definido en la norma de calidad.



La instructora con cara de prefecto de disciplina de escuela pública (en donde realicé gran parte de mis estudios de primaria y secundaria) nos contó sobre las normas que debían cumplirse en la organización a la cual ella misma había servido diligentemente por más de 35 años y en la que había hecho una carrera que la había llevado desde la recepción del edificio a la asistencia de training, no sin antes haber pasado por recepcionista, secretaria de personal, secretaria de uno de los coordinadores, secretaria de un supervisor y ahora secretaria del jefe de selección, delegada al training casi de tiempo completo. Nos recitó de memoria los horarios de entrada y salida, el catálogo de faltas leves, graves y gravísimas, el procedimiento para imposición de sanciones y por supuesto las causales de cada una de ellas, nos contó de todas las personas despedidas en el año por no cumplir fielmente con los compromisos laborales o no adecuar su carácter a las normas de empresa y además lo hizo en un tono enérgico que según ella muestra la energía que pone en su diaria labor para demostrar el compromiso y compenetración con los objetivos empresariales, advirtiéndonos constantemente de lo estricto de su jefe y lo difícil que era complacerlo con el trabajo ya que en sus palabras en un doctor muy exigente, debo confesar que recordé por un momento la formación en filas realizada en el patio de la escuela cuando la directivas consideraban que la conducta de alguno de los alumnos debía reprocharse y aprovechaban el momento para hacerlo en público y como si todos fuéramos culpables de la misma cosa.





Hacia las 12:30 se suspendió la “conferencia” para que nosotros tomáramos 1 hora para almorzar, debíamos regresar sin falta a la 1.30 pm so pena por supuesto de “no continuar en el proceso”. Los seleccionados por meritocracia fueron invitados a la sala de juntas en donde les servirían el almuerzo suministrado por la empresa, los otros 2 salimos a recorrer el barrio para tratar de encontrar un lugar donde almorzar con los pocos pesos que teníamos en el bolsillo, dada nuestra precaria economía después de varios meses sin recibir salario.



A la 1:30 de la tarde nosotros regresamos muy juiciosamente al salón de training para continuar con el proceso, allí nos esperaba la asistente de training. A nuestra llegada miró el reloj y luego a nosotros como para comprobar si aún estábamos en tiempo para continuar en el proceso. A eso de las 2 pm los meritócratas hicieron su arribo acompañados de usted mi gran jefe quien los instaba a continuar con el proceso con palmaditas en el hombro y fuertes abrazos, estimo que dada su ocupación y por supuesto la falta de cercanía no recibimos tales palmadas en el hombro, hoy entiendo que probablemente fueron mis celos profesionales o la falta de confianza en mi mismo lo que me llevó a tales pensamientos negativos en aquel tiempo.





El entrenamiento eso sí tenía una gran dosis de disciplina y mucho de automatización, como para enseñarnos a responder casi inconscientemente a cualquier orden recibida, la primera parte de cualquier frase llevaba una alta dosis de entonación militar, supongo que para despertarnos del letargo y luego prepararnos para asumir los nuevos desafíos.



A nosotros los que no habíamos llegado por meritocracia, nos correspondieron equipos un poco mas viejos y algunos en un grado de obsolescencia tal que dificultaban el manejo y en algunos casos carecían de las piezas mencionadas en las instrucciones, eso sí en honor a la verdad, no de todas para ser justo y también estimo que fue una consideración especial para no apabullarnos con tecnología de punta que probablemente no estaríamos en capacidad de manejar. .



El proceso fue realmente muy dedicado y tardó casi 3 semanas, que se me hicieron demasiado largas, debido a que mis fondos de por sí escasos habían pasado a ser francamente inexistentes, lo cual me obligaba a salir de mi casa muy temprano y caminar parte de la ruta para ahorrar el valor de uno de los pasajes, debía además llevar un sándwich en una bolsa de almacenes TIA, ya que tampoco tenía lonchera, por supuesto en esta etapa como aún no estábamos contratados, tampoco recibíamos salario, pero estábamos allí para aprovechar la oportunidad que ustedes nos estaban dando.







Afortunadamente usted con un corazón grande y tan generoso como el de un presidente de mi hermoso país que reinó, corrijo gobernó por varios años, tuvo a bien prestarme uno de los manuales de funciones, para que yo fuera automatizando también lo necesario para recitar de memoria las actividades a las cuales debía dedicarme en caso de terminar exitosamente el entrenamiento.



Pasadas las 3 semanas finalmente debimos presentar el examen final que nos habilitaría o no para seguir en el proceso, nunca supe por que los meritocratas no lo presentaron o si lo hicieron en otro momento, imagino que en su sabiduría quiso usted evitar que ellos seguramente mejor preparados causaran algún estrés a nuestras vidas, lo que recuerdo es que ese examen fue muy exhaustivo y duro casi 4 horas, las más tensionantes de mi vida, al terminar me dijeron que podía irme y que esperara llamada por si decidían contratarme.



Nuevamente pasaron casi dos meses pero al fin una mañana de Viernes me avisaron que debía presentarme el Lunes a la 7 de la mañana, con todos los exámenes que me pidieron inicialmente, certificados, recomendaciones, diplomas, extractos y demás documentos debidamente autenticados con no mas de 3 días de antigüedad y que si me interesaba, trabajar ganando el salario mínimo, como asistente administrativo, no se porqué pero después me decían en la oficina que era el patinador y que lo de asistente administrativo se debía a que debía asistir a la administración en todo lo que alguien debía hacer y no tenía ganas o tiempo de hacerlo.



Y ahí empezó mi carrera, cada vez más acelerada, pues debía ir corriendo por toda la empresa, luego al banco, al restaurante, a la bodega, y a todos los lugares donde alguien quería enviarme. Gracias al régimen físico impuesto, he eliminado en tan corto tiempo todo el sobrepeso que tenía al ingresar a esta empresa y me hallo perfectamente entrenado para correr la media maratón de Bogotá, la cual se corre mañana.



Por esta razón R E N U N C I O!



PD. Por si aún no se dio cuenta, todo lo anterior es completo sarcasmo, usted y su sistema son un completo fracaso!

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Puedes cambiar tus hábitos molestos!

Como cambias tus hábitos molestos!




Frecuentemente acuden a mí personas inconformes con algunos de sus hábitos, los cuales a pesar de serles de mucha molestia, no han logrado cambiar. Los hábitos son usos y costumbres que se arraigan a nuestra personalidad hasta casi parecer uno solo con ella y así son difíciles de notar, difíciles de identificar y difíciles de cambiar.



Creemos que somos así: desordenados u ordenados, afables o irascibles, calmados o acelerados. Confundimos nuestra manera de enfrentar algunas situaciones cotidianas con nuestra personalidad. Si bien los hábitos son una manera de expresar nuestra personalidad, son solo características visibles de ella y no la personalidad misma. Quiere esto decir que podemos cambiar muchas de las cosas que hacemos, modificar la forma como las hacemos y aún así conservar nuestra personalidad.



Los hábitos se crean a fuerza de repetir las acciones muchas veces y se suelen desviar hacia aquello que nos exige el menor esfuerzo a pesar de que con ello no se consiga el mejor resultado. Para cambiar un hábito se requiere: identificar el hábito que me molesta, definir que es lo que quiero cambiar, decidir lo que voy a hacer, revisar periódicamente el avance, celebrar el triunfo.



Identificar el hábito que me molesta

Algunos hábitos son buenos o no me generan molestia, soy consiente de sus beneficios y por ello no tengo intención de cambiarlos. Si tengo el hábito de caminar 30 minutos al día y ello me reporta beneficios, estoy conforme con ello y lo disfruto, no hay problema, por tanto no tengo nada que cambiar. Si por el contrario tengo el hábito de comer muchos dulces y esto me genera problemas de salud, intranquilidad, tensión y otras molestias, este puede ser un hábito que me gustaría cambiar.



Suele ocurrir que lo que identifico con frecuencia como molesto, no es el hábito en si, sino las consecuencias producidas por ese hábito. Me molesta engordar, me pone de mal genio estar gordo, me incomoda no tener suficiente agilidad debido al sobrepeso, suelen ser síntomas del hábito de comer desordenadamente y a su vez pueden ser causa de otros inconvenientes, luego debo identificar la causa que genera la molestia para corregirla efectivamente.



Definir que es lo que quiero cambiar



Una vez identificado el hábito que me genera molestias, debo identificar las molestias que quiero eliminar. El hábito de comer, no es lo que debo eliminar, es la tensión que me produce comer más allá de lo que es saludable o recomendable. Incluso para muchas personas tener algún sobrepeso no es su preocupación, no les genera molestias, ni tensión, no están interesadas en cambiar. No tiene sentido tratar de cambiar las cosas que las personas no quieren cambiar. La decisión de modificar algo de una conducta debe venir de quien quiere hacerlo y no de la recomendación externa.



Decidir que es lo que voy a hacer



Para tomar una decisión se requiere identificar las posibilidades a mi alcance y los beneficios que dicha decisión me puede reportar. Al analizar las posibilidades recomiendo no centrarse en porqué algo es posible, sino en identificar si hay algún obstáculo insalvable que me impide hacer los cambios, de lo contrario porque no intentarlo? En esta etapa debo decidir a quien voy a involucrar en mi proyecto, con quien puedo contar o a quien debo interesar para propiciar un mejor resultado. No es necesario hacerlo todo con tus propios medios, si cuentas con los de otros para hacerlo más fácil, pues aprovéchalos! También puedo servirme de apoyos positivos, mensajes o símbolos que me alienten y estimulen para lograrlo.



Recuerdo uno de mis clientes que quería manejar su hábito de comer que lo mantenía con cerca de 30 kilos de sobrepeso, al iniciar su proceso de coaching decidió que bajaría por lo menos 20 en los próximos 6 meses, aproximadamente 5 tallas, debidamente controlado por su médico para no generar otros problemas. Para estimular sus logros compró un traje a su gusto, una talla menos, y le colocó una tarjeta con un mensaje que decía “ Carlos, hoy es 2 de Octubre (30 días después), estás listo para estrenar?”, el traje fue colocado como el primero en su ropero, de tal forma que todos los días el lo veía al escoger la ropa. Este mensaje positivo y retador lo llevó a estrenarlo 1 semana antes con total comodidad.



Revisar periódicamente el avance



No existe una verdadera meta si esta no se ubica en un horizonte determinado de tiempo. Por ello es necesario definir un tiempo en el que quiero lograr algo y monitorear con regularidad el avance, ajustar lo que sea necesario, para que se pase de los sueños a realizaciones.



Revisar el avance puede consistir en verificar si los elementos que identifiqué como de molestia siguen siendo válidos o han variado. En coaching lograr una meta no implica necesaria e invariablemente obtener el objetivo inicial, sino avanzar hacia un objetivo de bienestar, me menor tensión y para ello es válido replantear cuidadosamente el proceso cuando se llegue a la conclusión de que el objetivo inicial dejó de ser suficientemente válido y retador como para seguir intentándolo. Frecuentemente los logros superan ampliamente los objetivos iniciales.



Lo verdaderamente valioso de un proceso es disfrutar todas las etapas, aprender de ellas y valorar los logros, desarrollarse y crecer. Obtener un objetivo es el final de un proceso, por lo tanto el final de una etapa, si el proceso no se ha disfrutado, el goce de la meta será tan fugaz, tan efímero que quizá no sea suficiente compensación por el esfuerzo realizado y dificultará emprender otros retos en el futuro.



Celebrar el triunfo



Nos hemos acostumbrado a reclamarnos por cualquier error cometido y nuestra cultura competitiva nos hace considerar que lo bueno que hacemos es lo que debemos lograr, lo que se espera de nosotros y por ello no hay nada que celebrar. Si seguimos con esta filosofía un día descubriremos que sin celebrar, sin que algo cambie cuando obtenemos nuevos logros, esos logros significan muy poco, son solo logros.



Por pequeños que sean nuestros triunfos, celebrarlos los hace valiosos. Si acostumbrarnos a celebrar esta será una razón que nos anime a cumplir metas y nos haga sentir más realizados, más felices, eso al final es lo importante. La celebración no tiene que ser especialmente grande, pero si debe ser significativa y ojalá compartida con las personas que en alguna forma hicieron posible con su apoyo, con su ejemplo o con su interés que llegáramos hasta el objetivo propuesto.



Como un coach te apoya?



La mayor parte de los esfuerzos que se emprenden jamás llegan a alguna parte, se quedan en el camino y se convierten en recursos desperdiciados. Suele suceder que te sientas motivado a emprender un nuevo proyecto y trabajes en el algún tiempo. Seguramente lo inicies habiendo revisado juiciosamente toda la información de que dispones y con un plan bastante desarrollado, en el cual crees haber incluido todo lo necesario para lograrlo. Ante los inconvenientes usarás tu lógica, la misma con que hiciste el plan e intentarás encontrar las causas por las cuales no resultó.

Un coach te ayudará a ver los aciertos y a buscar caminos para solucionar lo que no ha funcionado, te apoyará para que sigas intentando nuevas formas, con una visión amplia pero centrada, te retará a intentar soluciones creativas, visionarias, nuevas y diferentes o te cuestionará para que enfoques tu esfuerzo y encuentres el camino adecuado.



Un coach no será tu juez, no será tu maestro, pero será tu guía y te apoyará cuando haga falta, no hará el trabajo por ti, pero te ayudará a analizar las razones por las cuales hacerlo o por las que no lo has hecho eficientemente y te ayudará a entender como acometer tus proyectos de la manera que sea cómodo para ti, empleando tu capacidad para hacer lograr un mejor desempeño.



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viernes, 3 de septiembre de 2010

Tips para comunicarte efectivamente!

Seguramente tu ya sabes que los elementos de la comunicación son emisor, receptor y mensaje. Sencillo, pero… cierto?




Emisor y receptor son personas y como tales emiten y reciben mensajes filtrándolos a través de sus propias creencias, lo que les da una interpretación del mensaje, que puede ser diferente a lo que quiso transmitir quien lo emitió.



Lo que un emisor transmite no es lo importante, lo que un receptor entiende es lo que vale.

Revisa la siguiente lista de actores: Sean Connery, Timothy Dalton, George Lazenby, Roger Moore, Pierce Brosnan, y Daniel Craig.



Que tienen en común?



Todos ellos han interpretado a James Bond, el agente 007 durante una época de sus vidas, ellos han sido el vehículo que le ha dado vida al mítico personaje del cine.



Pero cada uno es un ser humano diferente, probablemente con pocas cosas en común con los demás y muy seguramente también con el personaje.



La persona que desempeña el rol, es decir el actor que da vida al personaje, es un ser de carne y hueso, que tiene sus propios gustos, intereses, afanes y satisfacciones. El “Quien”, es el ser humano que hay en cada uno de ellos y desempeña roles diferentes en su vida, para ser padre, hermano, esposo, amigo, actor y muchas cosas más.



Cada uno de los roles con los cuales se da a conocer, le permiten mantenerse activo, desarrollarse, crecer, ser feliz, sentir, amar, soñar. El “que” es cada una de las actividades que realiza. No se es actor, se es persona y se interpreta al personaje en su rol como actor.



Con frecuencia se confunde el que, con el quien. Muchas personas no han desarrollado suficientemente su mundo interior y deben soportarse en sus roles, logros y posesiones. A uno de ellos si les preguntas quien es, te dirá que un médico, vendedor, gerente, arquitecto, lo que tiene, sus títulos, sus posesiones, difícilmente será capaz de identificar quien es y difícilmente encontrará sentido a su vida lejos de lo que es y de lo que tiene.



Ser un médico, un ingeniero, un arquitecto, un vendedor o un gerente, es solo uno de los roles en los que actuarás a lo largo de su vida, si es todo lo que tiene, no sabrá como actuar cuando deba usar su yo interno para compartir con otros. Acaso para conquistar a una pareja le hará un diagnóstico médico? O quizá diseñará el mejor uso y aprovechamiento del espacio físico?, Tal vez organice, planee y ejecute un plan de mediano y largo plazo?. Si lo que trata de hacer es mostrarse a si mismo, deberá descubrir quien es y ser capaz de presentarse lejos de su rol profesional, de trabajo o de negocios. No te enamoras de un médico, te enamoras de una persona que te parece interesante y que además es médico, si te parece interesante te habría impactado, también siendo arquitecto, contador, vendedor, gerente, ingeniero o incluso un humilde desempleado. No te enamoras de James Bond o de la mujer maravillas, ellos son ficción, te enamoras de quien interpreta al personaje, y seguirás posiblemente enamorado, cuando el mismo actor interprete a un malhechor, un obispo, un soldado o cualquier otro personaje a lo largo de su carrera.




Y la comunicación?



Volviendo al tema, si emisor y receptor son personas, además del rol que desempeñen, que puede ser común a un grupo incluso numeroso, para comunicarte con cada uno de ellos deberás tener presente no solo lo que hace ( el que), sino el personaje que lo hace (el quien), no todos los profesionales de una misma especialidad ( un “que” común), tienen una persona común dentro (un “quien” diferente), por ello no será igualmente válido el mensaje para todos ellos.



Por supuesto que para que haya comunicación además de los interlocutores, se requiere un mensaje. Para que el mensaje sea entendido debe ser expresado en términos conocidos por los interlocutores, con la sencillez o la profundidad suficiente para facilitar el entendimiento pero a la vez interesar a la otra parte en el contenido. No basta con que el mensaje parezca interesante para el emisor, debe resultar interesante para el receptor y además debe ser entendido en forma similar por ambos para que se produzca la comunicación y no se generen rupturas inconvenientes.



Lo costoso de comunicar es la emisión, pero lo valioso es lograr transmitir el mensaje deseado.



El mensaje comprende no solo lo que se dice, también la forma como se dice, el momento y las circunstancias en que ello ocurre y todos los elementos “decorativos” que acentúan o atenúan el contenido, los cuales deben tenerse en cuenta a la hora de comunicar.



Si el mensaje es telefónico, tenga en cuenta el tono de la voz, susurrar, gritar, acentuar, h a c e r  
 p a u s a s …… , hablar “de afán”, comunican tanto como el contenido mismo.



Si el mensaje es escrito, tenga en cuenta,  EL USO DE MAYUSCULAS, negrillas, emoticones [ ;),  :) ], fondos, colores,  e  s  p  a  c  i  o  s, también inciden en la forma como el receptor interpretará el mensaje!



Si el mensaje es presencial, mirar fijamente o desviar la mirada, manotear, caminar, pararse de determinada forma, adoptar una actitud amenazante o sumisa, con frecuencia dice más de lo que usted dice a través de sus palabras e incluso muchas veces impide que ellas sean tenidas en cuenta.



Adicionalmente a la forma como usted se comunica, el mensaje es filtrado por quien lo recibe de acuerdo con sus propios y personales códigos. Algunas personas considerarán que su energía para decir las cosas es grosería y agresividad, mientras que otras lo verán como signo de motivación y compromiso.



Su actitud muchas veces motivará al interlocutor a suponer lo que usted quiere. Imagínese esa situación: Usted entra a un restaurante, dando muestras de mucho afán y le dice al mesero “estoy muy urgido, quiero…” En ese momento el mesero le interrumpe “señor yo estoy muy ocupado, es la hora pico y no puedo hacer ninguna excepción”. Su actitud sugirió al mesero cual era su pregunta, si el, no hubiera interpretado le habría permitido completar la frase “ saber cual es el plato menos demorado para ordenarlo”.



Su inteligencia emocional le permitirá lograr el grado de empatía con cada uno de sus interlocutores para “hacerse entender”, no basta con que usted crea que está diciendo todo claramente! Es necesario que verifique si esa misma claridad es la que los otros perciben y adopte una actitud que sea convenientemente interpretada por su interlocutor para que puedan comunicarse.